Algo de fiesta[Libre]

El estar en casa mirando las musarañas, aburre y por eso, cogi un vestido nuevo de mi armario y me lo puse. Sali de casa, cogi mi choche, un mini negro descapotable, y conduci por la ciudad, hasta llegar a la discoteca La Reina, tenia aparcacoches asi que no me tuve que molestar en nada. Al salir del coche note ciertas miradas y sobre todo algunas que recaían en mi trasero.

Sonreí al portero me conocia. Entre directa a la barra, pedi un martini y mientras esperaba observe a la gente

Aaron se hartó, por así llamarlo, de estudiar filosofía. Relamente le gustaba, pero no encontraba coherente ponerse a estudiar la filosofia, ética y moral de alguien que ya estaba muerto.. era mejor hecharle una ojeada y crearse una filosofía de la vida própia, como él había hecho. En estas que cojió su chaqueta negra y se puso sus tejanos ceñidos, rasgados a la altura de las rodillas, y salió de fiesta.

Llegó a La Reina montado en su motocicleta de tercera o cuarta mano, pero que no era anticuada para nada. Él era un manitas y la había tuneado para que tuviera un estilo propio. Le había grafiteado en la parte lateral dos grandes 'A' de Aaron Asher. Sonrió cuando unas chicas miraron esa moto y la aparcó para entrar, chocando los cinco con el portero, a la discoteca. La musica acariciaba sus oidos por lo que solo entrar se sumó a la fiesta con ese salero particular.
Aún no vió a la más popular de las chicas del insti, él era de la élite, pero jamás había tenido nada con esa particular rubia de sonrisa hipnótica.

Senti como alguien entro, en la discoteca porque las chicas miraban, deducide que era un chico. Pero no me gire. Supuse que si era alguien que mereciera la pena, vendria a la barra a pedir algo.
Enseguida me sirvierón la copa y esque era lo que tenia ser conocida y deseada por algunos de la discoteca.
Bebi un sorbo de la copa

Aaron chocó los cinco con algunos de los chicos del local, ya era habitual su presencia por esa peculiar zona. A las chicas, en cambio, les dió dos besos de forma elegante. Soltó un 'wooah' eufórico por el ambientazo que se respiraba ahí esa noche en concreto. Le encantaba ese local porque había de todo, era muy.. cómo llamarlo.. variopinto. Ya siguiendo su rutina se acercó a la barra y pidió un cubata mientras rebuscaba por el bolsillo trasero de su tejano rasgado un paquete de tabaco. No era fumador habitual, pero en esas ocasiones se fumaba uno o dos. Se puso a buscar el mechero pero por desgracias comunes en su monótona existencia, lo había perdido.

Se llevó el cigarrillo a los labios para sujetarlo con cierta gracia mientras veía de espaldas a una rubia bastante llamativa y preguntó con la voz distorsionada por tener el cigarrillo en los labios aún

- perdona, ¿tienes fuego?

Me gire, al escuchar la voz, la sabia que era el chico que entro. Era bastante guapo. Le conteste de una manera muy sensual
Corazón, yo soy fuego dije con una sonrisa fulminante
Mientras sacaba el mechero de su bolso

Aaron alzó una ceja al oir su respuesta y al verla voltearse pudo reconocer al acto ese rostro sensual que caracterizaba a la mujer que estaba en el numero uno del ránquing que mujeres más deseadas por los alumnos del instituto. Se relamió el labio inferior de forma distraida al oir su respuesta. Se encojió de hombros para susurrar por encima de la música machacona

- lo se preciosa, pero dudo que si froto el cigarrillo en tus labios se llegue a encender, por mucho fuego que me seas.

Dijo para luego reir de forma varonil bastante atractiva. Acercó su rostro a la mano con la que ella sujetaba el mechero, esperando a que se lo encendiera si ella lo quería así

Reí con su respuesta
Además quien te dice a ti, que mi fuego lo compartiera contigo dije burlona mientras le encendia el mechero.

El chico era bastante mono, me sonaba bastante de verlo en el instuto, pero la memoria me fallaba no recordaba bien quien como se llamaba

- supongo que la intuición masculina

Dijo de nuevo, con la boca torcida y la voz distorsionada al hablar con el cigarrillo en los labios, ante su primera respuesta. Parecía que esa rubia jugaba con él, y esa noche estaba de buenas por lo que se supuso que pasarían un buen rato charlando. Ensanchó esa sonrisa de anuncio de dentífrico que no dejaba indiferentes a las chicas cuando veían esa combinación de unos carnosos labios y unos dientes blancos y perfectos. Dió una lenta calada, separándose, una vez ella se lo encendió. Sacó el humo por la nariz y susurró

- Aaron, Aaron Asher.. también soy de la élite.. el revolucionario, ya sabes.

Dijo haciendo referencia a su fama de meterse en líos por sus ideales anarcas y esas cosas políticosociales que no importaban a muchos pero que para él suponían motivo de peleas callejeras.

Reí y asenti con su comentario, sabia que me sonaba de algo, y esque era lo que la gente llamaba el chico revolucionario de la elite

Bueno, sabes quien soy yo? dije dando un trago a la copa

Al ver la copa de ella aterrizó en el suelo, ya que andaba perdido en sus pensamientos, y miró hacia la barra. Ahí estaba su cubata. Sonrió de forma elegante y cojió el cigarillo entre el dedo corazón y el índice para agarrar luego el cubata y llevárselo a esos labios carnosos y sedientos. Solo se mojó los labios para luego pasar la lengua por ellos, como limpiándose los restos de alcohol.

Oyó su pregunta y pensó una respuesta ingeniosa

- ¿y si te digo que no te conozco? ¿vas a presentarte?

Bueno, quizás. Solo me presentaria si creyerá que fueras interesante el chico además de guapo era inteligente, creía que la conversación iba a estar de fabula.

Sonrió de forma misteriosa al oir esa respuesta ingeniosa que lo invitaba a ser aún más intrigante para ella. Levantó el cigarrillo y dió una lenta calada para inhalar todo el humo que contaminaba sus pulmones jovenes y aparentemente sanos

- creo que me arriesgaré.. tengo tu cara vista pero desconozco tu nombre. ¿Vas a ser una chica buena y vas a presentarte? ¿o tengo ques eguir jugando al perro y al gato para hacerme el interesante y acabar aprendiendome de memoria tu nombre y tu sonrisa pícara?

Dijo mientras el humo luchaba por escapar de entre sus labios y perderse entre la bullición de ese local que retumbaba de decibelios demasiado altos.

No hace falta que jugemos al ratón y al rato para que te aprendás mi nombre y te grabes mi sonrisa picara entu cabecita,

Ya me presento, soy Ashley, Ashley Runway, Te sueno? dije con una cara burlona

- claro que me suenas.. es más, ya conocía tu nombre. Pero me gusta ver como se mueven tus labios al susurrar tu nombre para mi

Bromeó haciendose el vanidoso mientras exhalaba el resto de humo que no había logrado salir de esa prisión durante su discurso. Ladeó un poco la cabeza para que su flequillo que caía gracilmente por su frente no le molestara esa perfecta visión. Apoyó un codo en la barra y alzó una ceja esperando una ingeniosa respuesta por parte de ella, preguntándose si habría logrado sorprenderla.
Dió un leve trago del cubata y se relamió de luego los labios

Le sonreí de lado
Es normal que te suene, lo raro seria que no hubieras oido hablar de mí dije mientras observaba su flequillo
Me dejas hacerte una cosa? le dije clavando mi mirada en la suya

- no suelo ir por ahí regalando mi cuerpo a chicas con sonrisas cautivadoras y voz de ángel.. pero contigo haré una excepción

Bromeó ladeando la cabeza para mirar a la gente que bailaba en la pista, vió a un par de chicas que cuchicheaban mirándolos y negó con la cabeza. Sabía que eso era motivo de cotilleo..pero quñe le ivana hacer, eran dos de la elite. Y además, por parte de él, se sentía relajado y con ganas de pasarlo bien cuando estaba al lado de esa rubia llamada Ashely.
Volvió sus ojos claros en ella y esperó a que le hiciera lo que se propusiera, sin temer por su seguridad.

Tranquilo no te voy a morder, aunque reconozco, que no estaria mal Me acerque a él, y le peine a mi gusto su flequillo

Mucho mejor dije mordiendome el labio inferior

Los ojos azules de Aaron se posaron en esos ojos que caracterizaban a esa rubia. Sintió los dedos de ella acariciar su pelo color castaño, pudo sentir la calidez de las yemas de los dedos de ella acariciar la desnuda piel de su frente libre de granos, espinillas u otros síntomas de adolescéncia.
No dijo nada por el momento, sintiendo que ella lo daba por hecho pero no se separaba lo más mínimo, cosa que, para que negarlo, tampoco le desagradaba. Observó el labio inferior de ella, que se mordisqueaba, supuso que castigándose por ser tan rematadamente atractiva.
Él se limitó a relamerse el suyo, dejándolo brillante y húmedo..

Aproveche cuando me miro para volverle a sonreir. Estaba orgullosa de mi sonrisa. Que guapo estas para comerte dije haciendo un gesto de morderle

- se podría decir lo mismo de tí.. Ashley..

Dijo en un susurro flojo, por debajo de la música, pero sabiendo que ella lo oiría gracias a la proximidad que existía entre ambos rostros. Suvió de nuevo a los ojos de ella y sonrió al verla tan provocadora. Ese gesto de morderle le gustó y decidió imitarlo, pero arriesgando más. Así que sin apartar la vista de su rostro ni separarse nada, dejó el cubata en la barra y sujetó con fuerza el cigarro entre los dedos. Miró los labios de ella e hizo el gesto de morder, pero atrapando con suavidad su labio inferior.

Senti como le llego la provocación y como me mordia el labio inferior.
Eres un sexsimboll en esta discoteca- dije mirando a la chicas que nos miraban- se pondran celosas si sigues haciendo eso dije sin apartarme de él

Aaron hizo caso omiso a las miradas entre molestas y sorprendidas que les lanzaban un grupito de chicas. La verdad ni le iva ni le venía lo que pudieran pensar.. él no vivía para el publo, vivía para él. Así que mantuvo captivo el labio inferior de ella entre sus perfectos dientes. Tironeó un poco de forma sensual y luego se lo soltó con una sonrisa igual de pícara que la de ella al hablar. Tampoco osó separarse, dió una calada y apartó el rostro para no soltarle el humo a la boca, no sabía si eso le hubiera molestado. La miró de nuevo para susurrar

- no soy un sexsymbol.. y si se ponen celosas.. es su problema

Tienes razón, aqui hay mucha chismosa celosa dije sin apartar mi rostro.
Cogi el cigarro que tenia en la mano él
Te voy a enseñar a fumar Dije mientras aspiraba el humo y lo echaba por encima con sensualidad

Se rió con una burlona sonrisa de su comentario inicial y sintió los dedos de ella en su mano, arrebatándole ese medio consumido cigarro con aroma a labios de Aaron Asher. La vió llevárselo a los labios y cuando dijo eso no pudo evitar alzar una ceja y finjir tos al recibir la humareda. Sonrió de forma agraciada cojió suavemente la mano de ella para dar una calada pero haciendo que ella sujetara el cigarrillo

- vas a ver cómo se fuma en inglaterra..

Dicho esto se acercó y selló sus labios a los de ella de forma sutil para exhalar el humo dentro de la boca de ella. Se separó, dejando esos carnosos labios de rubia humeando

Note sus labios, pasandome el humo de su calada. Fue una sensación extraña, entre excitante y algo ahogante.

Vaya pues si asi se fuma en Inglaterra, creo que me voy a ir a vivir allí, pero tampoco puedo irme de aquí porque California sin mi, no seria lo mismo dije acabandome su cigarro. Y tirandolo al suelo.